Necesidades y Problemáticas de cada Región.
Región Norte o Cibao.
La Región Norte o Cibao goza del privilegio de ser la región más próspera de la República Dominicana, sin embargo esta enfrenta diversas vicisitudes que afectan grandemente a sus pobladores.
Falta de Agua Potable.
La falta de agua potable afecta a numerosas comunidades y pueblos del Cibao central, circunstancia que preocupa a autoridades y a organizaciones comunitarias, que plantean alternativas eficientes para resolver esa problemática.
En tanto, la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan), en un comunicado enviado a los medios de comunicación locales, manifestó su preocupación por el bajo nivel de la hidroeléctrica Tavera-Bao, de donde se surte el acueducto Cibao Central, que suple agua a cientos de localidades de la región.
Según Coraasan, en situaciones normales el caudal del embalse es de entre 320 y 324 metros cúbicos sobre el nivel del mar, pero en la actualidad, su nivel es de 314.35 y cada día baja cuatro pulgadas, por la falta de lluvias.
El organismo autónomo del Estado responsable del suministro de agua en Santiago que tiene una población de al menos 1, 300, 000 habitantes, y que también abastece a pueblos de la provincia Espaillat, exhortó a los usuarios a no desperdiciar el líquido.
En tanto, la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan), en un comunicado enviado a los medios de comunicación locales, manifestó su preocupación por el bajo nivel de la hidroeléctrica Tavera-Bao, de donde se surte el acueducto Cibao Central, que suple agua a cientos de localidades de la región.
Según Coraasan, en situaciones normales el caudal del embalse es de entre 320 y 324 metros cúbicos sobre el nivel del mar, pero en la actualidad, su nivel es de 314.35 y cada día baja cuatro pulgadas, por la falta de lluvias.
El organismo autónomo del Estado responsable del suministro de agua en Santiago que tiene una población de al menos 1, 300, 000 habitantes, y que también abastece a pueblos de la provincia Espaillat, exhortó a los usuarios a no desperdiciar el líquido.
Depredación de Recursos Naturales
Pese a las constantes denuncias realizadas por ecologistas y ambientalistas, la depredación de los recursos naturales ha continuado en la región del Cibao, cuyo problema se ha agravado en las últimas semanas.
Además de la cordillera Septentrional, las lomas de las comunidades de Juan López y Villa Trina, de Moca, son asoladas por inescrupulosos en busca de ámbar, ante la indiferencia de las autoridades de Medio Ambiente. También, el río Bao, importante fuente acuífera de la zona sur rural de Santiago, es socavada con la extracción de materiales, con el alegato de que es sometido a un proceso de “dragado”. El ambientalista y expresidente de la Sociedad Ecológica del Cibao (Soeci), Nelson Bautista, al referirse al tema, consideró que con las excavaciones en la Cordillera Septentrional y en las lomas de Juan López y Villa Trina, en Moca, se le hace un inmenso daño al medio ambiente y los recursos naturales de esas zonas.
Dijo que las autoridades con capacidad de gestión seria tienen que visitar el pico Diego de Ocampo y las comunidades Palmar, en Villa González; Cumbre de Juan Veras, La Cumbre, Palo Amarillo, en la carretera turística, para que analicen la situación de persistente depredación a que es sometida la Cordillera. “Eso parece un panal de abejas, por la cantidad de túneles, terrenos privados invadidos, las orillas de los ríos totalmente depredadas por búsqueda de ámbar”, afirmó el ambientalista.
El expresidente de Soeci recordó que el año pasado por el río Jacagua no corrió agua por espacio de cuatro meses, porque los mineros para poder sacar ámbar, aprovechan el poco caudal de los riachuelos que nacen en la parte alta de la cordillera Septentrional, realizando pequeñas represas. “Pero, parece que eso a nadie le duele, y las pocas autoridades que se interesan, a veces se hacen cómplices por omisión”, se quejó.
Agregó que durante años, desaprensivos han talado miles de árboles de caoba, lo que les ha costado esfuerzo a los ambientalistas de aquí, mantener las pocas áreas protegidas, con que cuenta la cordillera Septentrional.
“La gente tiene que entender que este no es un problema de los medioambientalistas, es un problemas de todos, es prudente y necesario hacer una especie de protesta y de llamado de atención por la Cordillera”, apuntó Bautista.
Exhortó a la sociedad santiaguera y al liderazgo empresarial local a que despierten y exijan a las autoridades, respeto por los recursos naturales de esta provincia y de otras localidades del Cibao.
Problemas Sanitarios
Diversos estudios y levantamientos realizados en casi dos décadas por el Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD), a través de su dirección técnica, han arrojado que en las provincias que componen la Región Nordeste y el Cibao Central, como las demás de nuestra nación, pese a los continuos requerimientos de sus autoridades y de sus instituciones, no se ha podido obtener una correcta planificación del desarrollo por parte del Estado, para la implementación en ellas de eficaces iniciativas y políticas que hagan posible proveerlas de áreas y estructuras sanitarias adecuadas que permitan preservar su medio ambiente y la salud de los que las habitan y los que la visitan.
Conforme a estos, lo indicado se torna sumamente preocupante en el momento actual, dado que la deficiencia que muestra nuestra República en sus sistemas cloacales para el depósito y conducción de sus aguas negras y desechos sólidos, como de plantas de tratamientos para los mismos en sus zonas residenciales y comerciales, es un factor obstaculizante al proceso que está llevando el Gobierno central y diversos sectores nacionales, para insertarnos con eficiencia en la economía tecnológica y cibernética, en virtud de que el agua, el medio ambiente y las estructuras sanitarias son elementos primarios para su exitosa ejecución, como necesidades humanas básicas y prioritarias, para la población permanente y transitoria en el país.
Se asume que este problema amerita una urgente solución, en razón de que el estado de insalubridad que se está generando en las diferentes poblaciones del Nordeste y el Cibao Central, como en otras que conforman el territorio nacional, por la ausencia de adecuadas estructuras sanitarias, conduce a sus habitantes hacia un peligroso crecimiento epidemiológico que estamos obligados a detener, para evitar engendrar en forma colectiva situaciones perjudiciales en que todos seremos afectados y tendremos que lamentar.
Cita, al respecto, el caso específico de San Francisco de Macorís, donde son miles de familias y muchas las urbanizaciones que están ubicadas cercanas al lugar donde desembocan las aguas negras de la planta de tratamiento, que operó al servicio de determinada área urbana hasta convertirse en una estructura carente de funcionalidad y existencia por falta de un correcto cuidado.
A lo expuesto, se suma que aun hubiera estado operando en condiciones normales la planta de tratamiento de aguas negras que se levantó en la década del 1970, San Francisco de Macorís carece de adecuadas plantas de tratamiento y las necesarias estructuras sanitarias de sus aguas residuales y cloacales para atender a los nuevos proyectos urbanísticos levantados, ante la demanda de viviendas en las últimas décadas y que han abarcado parte del área rural, al igual que otras provincias de la zona, con una población en constante crecimiento.
Sostienen, a su vez, que la realidad expuesta no solo es palpable en la referida ciudad, sino también es el común denominador del conjunto de provincias que componen la Región Nordeste y el Cibao Central, en las cuales no se ha motorizado acciones que tiendan, sobre la base de una correcta planificación, a lograr junto con el aumento de su población y su solidificación como centro productivo nacional, el propiciamiento de iniciativas y políticas tendentes a promover en las mismas el desarrollo en sus áreas sanitarias, así como también de sus estructuras destinadas a preservar su medio ambiente y garantizar la salud de las dominicanas y dominicanos que conforman su población.
Añade a lo anterior, como otro agravante, la construcción, a partir del periodo gubernamental del año 2000, de nuevos acueductos en las pequeñas y grandes comunidades de esta zona del país, los cuales han incrementado en gran proporción los volúmenes de desechos sólidos, sin contar con las instalaciones sanitarias, que respondan y faciliten la correcta canalización y tratamiento de ellos.
En procura de soluciones idóneas a tan graves problemas, el Consejo Regional de Desarrollo, Inc. (CRD) sugiere al gobierno central, con el apoyo de los diferentes sectores sociales y de organismos internacionales, acoger los estudios y diagnósticos que desde el año 1996 ha venido presentando, para motorizar una mejor política e inversión sanitaria en República Dominicana, asumiendo las direcciones contenidas en el plan estratégico de desarrollo sanitario que ha elaborado en favor de las nueve provincias que integran el Nordeste y el Cibao Central, como ruta para alcanzar un desarrollo nacional sustentable.
Región Este
Violencia.
Las muertes violentas de esposos contra sus mujeres, el poder del narcotráfico con el pago a sicarios para eliminar a adversarios y las invasiones de tierras estatales y privadas, fueron los hechos más notorios registrados en las cinco provincias que integran la región Este, en el 2011.
El secuestro y posterior asesinato a tiros del periodista José Silvestre, ocurrido a principio de agosto del 2011 en La Romana, por parte de sicarios al servicio del narcotráfico, está entre los sucesos que más conmocionaron a esta parte de la isla.
La lucha por la tenencia de la tierra llegó a su punto más álgido cuando en un campo de El Seibo dos personas resultaron muertas y otras heridas, por una litis entre las empresas Castelar del Grupo Campollo, de origen guatemalteco, y la Azucarera del Este, de españoles, que se disputaban 105 mil tareas que el Consejo Estatal del Azúcar (CEA), arrendó a ambas empresas.
Las víctimas fueron identificadas como Orlando de los Santos Santana, de 31 años, residente en la comunidad cañera de Cañada del Agua, y Alexis Cayetano (Kiko), de 45 años, residente en el batey Haití Mejía, ambas comunidades pertenecientes a la sección Mata de Palma, de El Seibo.
Aunque algunos hechos oscurecieron el panorama social, otros vinieron a aliviar la carga económica de muchas personas que lograron un empleo empleo seguro.
A esta zona de ganadería, agroindustria y turismo, le espera un futuro promisorio, conforme las inversiones en el campo turístico, vial y la agroindustria cañera se vienen realizando a partir del 2011, destacándose la apertura de los ingenios Porvenir y Alcoholes Finos en San Pedro de Macorís.
Sin embargo, más allá de las buenas noticias producidas por el anuncio de inversiones en proyectos hoteleros y la agroindustria, también se sintió la lucha por la posesión de la tierra.
Los robos de ganado y las invasiones de tierras privadas se convirtieron en un dolor de cabeza para dueños de fincas y el poder judicial, que vieron con preocupación que las invasiones eran patrocinadas, según denuncias de sectores, por supuestos funcionarios.
Los ganaderos denunciaron el hurto de más de 2,000 reses, y dijeron que muchas de las cuales eran descuartizadas en las fincas y pasadas por los frentes de los cuarteles policiales y militares de Higüey, El Seibo, La Romana, San Pedro de Macorís y Hato Mayor.
Entretanto, el Gobierno siguió avanzando los trabajos de la Autopista del Coral, una obra que acortará la distancia entre los pueblos del Este.
Las víctimas fueron identificadas como Orlando de los Santos Santana, de 31 años, residente en la comunidad cañera de Cañada del Agua, y Alexis Cayetano (Kiko), de 45 años, residente en el batey Haití Mejía, ambas comunidades pertenecientes a la sección Mata de Palma, de El Seibo.
Aunque algunos hechos oscurecieron el panorama social, otros vinieron a aliviar la carga económica de muchas personas que lograron un empleo empleo seguro.
A esta zona de ganadería, agroindustria y turismo, le espera un futuro promisorio, conforme las inversiones en el campo turístico, vial y la agroindustria cañera se vienen realizando a partir del 2011, destacándose la apertura de los ingenios Porvenir y Alcoholes Finos en San Pedro de Macorís.
Sin embargo, más allá de las buenas noticias producidas por el anuncio de inversiones en proyectos hoteleros y la agroindustria, también se sintió la lucha por la posesión de la tierra.
Los robos de ganado y las invasiones de tierras privadas se convirtieron en un dolor de cabeza para dueños de fincas y el poder judicial, que vieron con preocupación que las invasiones eran patrocinadas, según denuncias de sectores, por supuestos funcionarios.
Los ganaderos denunciaron el hurto de más de 2,000 reses, y dijeron que muchas de las cuales eran descuartizadas en las fincas y pasadas por los frentes de los cuarteles policiales y militares de Higüey, El Seibo, La Romana, San Pedro de Macorís y Hato Mayor.
Entretanto, el Gobierno siguió avanzando los trabajos de la Autopista del Coral, una obra que acortará la distancia entre los pueblos del Este.
Delincuencia.
La delincuencia es el problema que la gente menciona como el de mayor importancia, aumentando la percepción de 2% en 2004 a 26% en 2015, con lo que supera el promedio de la región, que es de un 23 por ciento.
El informe sostiene que el aumento en la percepción de la delincuencia como uno de los problemas más importantes ha ido acompañado de un crecimiento en la percepción de la inseguridad en el país.
El estudio señala que los dominicanos que dicen vivir en un país cada día más inseguro han pasado de un 49 por ciento en 2007 a un 62% en el presente año.
El estudio señala que los dominicanos que dicen vivir en un país cada día más inseguro han pasado de un 49 por ciento en 2007 a un 62% en el presente año.
En cuanto a los problemas políticos, República Dominicana está por debajo del nivel de la región debido a que apenas un 4% lo considera como un problema importante. La percepción de transparencia en la República Dominicana es más alta que el resto de la región. Un 57% de la ciudadanía opina que hay transparencia en las empresas privadas, un 50 por ciento dice lo mismo del Estado y un 56% indica que hay transparencia en el Gobierno. Las cifras son equivalentes aproximadamente a 20 puntos porcentuales por sobre la percepción de transparencia que existe en América Latina.
Problemas con el Transporte.
La Federación Nacional de Transporte la Nueva Opción (Fenatrano) denunció ayer una supuesta persecución perpetrada por miembros de la Policía Nacional y choferes de la región Este contra el secretario general del Sindicato de Choferes y Propietarios de Autobuses de La Altagracia (Sichropola), Leonte Torres (a) Choly.
Según Antonio Brito, vicepresidente de Fenatrano, además de la Policía, a la supuesta trama también se han sumado los fiscales de las provincias La Altagracia y La Romana, para aliarse contra el sindicalista, del cual no se pudo dar el paradero ayer.
Brito sostiene que en contra de Leonte Torres se ha establecida "una red de espionaje" con la intención de crear una trama en su contra, y los dirigentes de Fenatrano en la región Este. "Se le ha espiado y se le ha vinculado con todo al que se ha comunicado en los últimos meses", dijo Brito.
Fenatrano asegura que la persecución busca entregar el poder del sindicato a Junior Castro, Radhamés Cabrera, Teófilo Cabrera y Héctor Castillo Pión.
El portavoz de la Policía, Diego Pesqueira, pidió ayer a Fenatrano a dirigirse ante las autoridades, para discutir el inconveniente y la supuesta persecución
Región Suroeste.
|
La Región Sur de la República Dominicana es calificada, tanto por las instituciones nacionales, como por los organismos internacionales responsables de caracterizar los niveles de desarrollo de nuestra nación, como la zona más deprimida socialmente del país y como una región prioritaria como objeto de asistencia social y económica.
Muchas de las comunidades del sur se encuentran dentro de las zonas donde los recursos para la producción de alimentos son eminentemente pobres y escasos. Por sus condiciones de clima y suelo, está considerada como la región más pobre del país.
Muchas de las comunidades del sur se encuentran dentro de las zonas donde los recursos para la producción de alimentos son eminentemente pobres y escasos. Por sus condiciones de clima y suelo, está considerada como la región más pobre del país.
La mayor parte de la región sur es Bosque Seco Subtropical. Corre desde los valles de San Juan y Neyba, así como también gran parte de la planicie de Azua y de Baní, llegando hasta Hato Viejo al sur de San Cristóbal. Esto incluye las zonas de las planicies y colinas sureñas de la península de Bahoruco. Topográficamente esta zona se extiende desde el nivel del mar hasta alrededor de 500 m. de elevación.
Este tipo de zona de vida recibe entre los 500 y 1000 mm de lluvia anual y tiene una bio-temperatura anual promedio de 18º a 24º C. En algunos de los cerros más altos se encuentran pequeñas áreas de transición entre esta zona y la zona de bosque húmedo Subtropical, debido a lluvias orográficas y a temperaturas un poco más frescas.
La vegetación natural de esta zona de vida consiste en bosques bajos con un solo estrato y con abundantes especies de hojas duras. Algunas de las especies de árboles de crecimiento lento producen madera excepcionalmente dura y pesada, algunos de estos incluyen Guaiacum officinale (Guayacán). La especie de árbol más abundante es la Prosopis juliflora o la agresiva Acacia farnesiana (Cambrón, Mimosaceae); sin embargo Bursera simaruba (Almacigo), Phyllostilon brasiliense(Baytoa), Acacia scleroxila (Candelón) y
Plumeria alba (Alelis) también pueden encontrarse en abundancia al nivel local. En las áreas de transición a bosques húmedos, son comunes Sabal umbraculífera (Cana) y Swietenea mahogani (Caoba).
La erosión de los suelos limita de manera definitiva el incremento del ingreso de los agricultores. Los suelos fértiles en los valles de los Bosques Secos Subtropicales son las principales áreas que utilizan para la agricultura a riego. Por lo tanto, no queda casi nada de la vegetación natural en las áreas irrigadas. Las áreas de terreno ondulado, inadecuado para el riego y muy secas para la mayoría de las cosechas, con frecuencia están cubiertas de vegetación natural.
Estos bosques secos constituyen la principal fuente de leña y carbón; son además las áreas más importantes para la cría de cabras. Agricultores y ganaderos practican la tala indiscriminada y no controlada de árboles para producir carbón y usar estos bosques como campo abierto para la cría de cabras, conduciendo a la degradación de muchas de las áreas accesibles con la vegetación natural. Los agricultores que usan el método de tala y quema (conuqueros), ahora están empezando a avanzar a través de esta frontera y han penetrado en los bosques secos. Tradicionalmente evadieron esta Zona de Vida debido a los riesgos de que la cosecha se malogren por causa de las sequías.
Otra Zona de Vida que existe en la región, aunque en menor proporción, es el Monte Espinoso Subtropical. Ocurre particularmente en la zona suroeste, donde se extiende desde el Lago Enriquillo hasta Puerto Viejo, por lo general a menos de 300 m de elevación. Otros pequeños tramos de esta Zona de Vida bordean la Bahía Honda (Cabo Rojo), la Bahía de Ocoa y la Bahía de las Calderas (Punta Salinas).
Las condiciones climáticas se caracterizan por menos de 500mm de lluvia anual y una bio temperatura anual de promedio de 18 y 24º C. La combinación de altas temperaturas y poca lluvia, causa que haya una evapotranspiración (ETP) potencial entre 2.0 y 4.0, es decir que la demanda evapotranspirativa de la vegetación natural es de 2 a 4 veces mayor que la cantidad de lluvia.
La vegetación natural del Monte Espinoso Sub-tropical consiste mayormente de arbustos espinosos y cactus, incluyendo el Opuntia caribea (Guazabara) y Neoabbottia panicualta. También son comunes Copernicia berteroana (Yarey), Prosopis juliflora (Bayahonda).
El fértil aluvión en esta Zona de Vida se usa para irrigar cosechas estaciónales. Sin embargo, se tienen problemas de salinización, debido al manejo inadecuado de las aguas irrigadas y a la alta proporción de ETP. Las abundantes tierras onduladas son utilizadas como fuente de madera combustible y de pasturajes para cabras. La falta de manejo total de estos limitados recursos ha conducido a la considerable degradación de la vegetación natural y la desertificación.
Se advierte que una amplia población con carencias reside en San Cristóbal, Azua, Peravia, San José de Ocoa, Barahona, Bahoruco, San Juan, Pedernales, Independencia y Elías Piña, el conjunto de provincias que conforman las tres regiones al Suroeste del país: Valdesia, Enriquillo y El Valle.
Pobreza.
Un 29.5% de los hogares en la región El Valle padece extrema pobreza; un 31% en la región Enriquillo está en igual situación; mientras que en Valdesia un 11.9% de los hogares está en extrema pobreza, según el Mapa de Pobreza de la República Dominicana 2014, elaborado por Antonio Morillo Pérez, investigador del Ministerio de Economía y Desarrollo.
Cuatro de las provincias más pobres del país están ubicadas en el Suroeste: Elías Piña con una tasa de 83.2% en pobreza, siendo la provincia más pobre del país; Pedernales con 74.6%; Bahoruco con 74.5%, e Independencia con 72.9% en pobreza, según el referido informe.
Demarcaciones que por demás poseen grandes potenciales para emprender el desarrollo socioeconómico tan deseado por sus habitantes, sin embargo, padecen una ancestral pobreza.
La precariedad golpea la frontera. Tres de las provincias más pobres de esta zona están situadas en la colindancia con Haití, y son Pedernales, Independencia y Elías Piña, cuyas poblaciones se inscriben óen buena medidaó en la línea por debajo de la pobreza.
“El dossier de demandas que de manera individual han preparado las distintas provincias del Suroeste es voluminoso; pero todas tienen en común estos reclamos: mejores vías regionales, más clínicas y hospitales, más acueductos y escuelas; reparación o ampliación de canales de riego; construcción de politécnicos y polideportivos, y más atención a los cultivos como el café, el arroz, los vegetales y frutas sistemáticamente afectados por plagas o por las sequías”, dijo Franjul.
Falta de agua potable.
“Sin agua, el Suroeste no podría avanzar jamás en otras direcciones, y la esperanza es de que este problema sea encarado sin más demora terminando la presa de Monte Grande, que garantizará riego para más de 400 mil tareas ahora infértiles en las provincias de Bahoruco, Independencia, Pedernales y Barahona”, precisó Franjul. Él se sumó a otras voces que por años se han levantado para clamar por la región del Sur, asumiendo sin retraso que la presa de Monte Grande es una de las obras más importantes que aspira toda la región de Enriquillo.
Adicionalmente, en noviembre de 2014, el entonces obispo de la diócesis de Barahona, monseñor Rafael Leonidas Felipe Núñez, quien había emprendido una lucha tenaz por esta obra, pidió al presidente Danilo Medina que aportara los recursos económicos suficientes para que se reanudaran los trabajos de lo que llamó “el metro del Sur”.
Con una inversión que supera los 401 millones de dólares, las asignaciones presupuestarias a esta obra, han sido el reclamo óuna y otra vezó de sectores representativos del Suroeste, incluyendo a legisladores que han formado núcleo con el fin de que el Gobierno asigne recursos y continúe el proyecto. El 13 febrero de 2014, el presidente Medina inició los trabajos de construcción de la presa de Monte Grande, proyecto a cargo del Instituto de Recursos Hidráulicos (Indrhi).
“Aún tenemos voz para reclamar y lo seguiremos haciendo por Monte Grande, por mejores hospitales y clínicas, mejores carreteras, más apoyo a la producción y más inversión para impulsar el desarrollo turístico”, escribió el jefe de Información y columnista de este medio, Tomás Aquino Méndez, el 2 de septiembre de 2014, uniendo sus palabras a un clamor colectivo. Él, como otros periodistas oriundos del Sur, es un defensor de esta obra hídrica que augura mejoría al manejo del agua para toda la zona Suroeste; voces que recuerdan no solo las necesidades de la región, sino también las promesas de distintos gobiernos, muchas de las cuales están pendientes.
El 15 de octubre de 2010, el obispo emérito de Barahona, Felipe Núñez, dijo al referirse a Monte Grande: “Aquí tiene que ser la gran prioridad en nuestra región la superación de la pobreza. Esa es la meta que tenemos que abrazar y luchar todos para superar la pobreza”.